En este Día Mundial de las Telecomunicaciones y la Sociedad de la Información se celebra el 160º aniversario de la Unión Internacional de Telecomunicaciones.
Del telégrafo a la radio, de Internet a la inteligencia artificial, la tecnología ha transformado nuestra forma de vivir, trabajar y vincularnos. Sin embargo, sigue habiendo profundas desigualdades en relación con los beneficios que aporta. El tema de este año, sobre la igualdad de género en la transformación digital, es tan oportuno como urgente.
Por todo el mundo, los sesgos algorítmicos refuerzan viejos prejuicios. El acoso y el abuso en línea silencia a las mujeres y las empuja fuera de las redes. Además, las mujeres y las niñas siguen estando muy infrarrepresentadas en los propios ámbitos que dan forma a nuestro futuro: la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas.
Esta injusticia nos perjudica a todos. No podemos aceptar un futuro digital que deje atrás a la mitad de la población. Debemos invertir urgentemente en capacidades digitales para todos, aprovechar el potencial de la tecnología para mejorar la vida de las mujeres, eliminar las barreras a su plena participación y su liderazgo en el sector tecnológico y seguir trabajando para erradicar la violencia de género en todas sus formas, tanto en el ámbito digital como fuera de él.
El Pacto para el Futuro y el Pacto Digital Global trazan el camino para colmar todas las brechas digitales y reforzar la colaboración en favor de los derechos de las mujeres en línea. Tomemos juntos ese camino y ayudemos a conseguir que la transformación digital sea una fuerza de progreso, inclusión e igualdad.
Cuando la tecnología beneficia a todos, ganamos todos.